Un miercoles bien Wardense, con el mejor jugador de la historia

Miercoles.

Entrenamiento gris en el White Stadium.

La gente llega timida a entrenar. Alguien propone un fulbito, alguien dice que no. Alguien patea una pelota. Alguien dice que estaria bueno ir a comer unos choris en vez de correr como tarados alrededor de la cancha. el Coco hace escenas de celos y Comala se prueba sus nuevos pescadores para el veranito.

Comenzamos a correr. Unas vueltitas. unos idas y vueltas. Y de repente, de entre las sombras, haciendose cada vez mas grande en la noche wardense, desde el fondo del predio va apareciendo el llamado, por concenso popular de quienes tuvieron la fortuna de verlo jugar y compartir una cancha con el, el mejor jugador de la historia del handball wardense.

Llegó con su bolso al hombro. Cambiado ya y preparado para la actividad inmediata, como es su costumbre. Andar determinado. Mirada al frente. Pasos decididos. Aires de lider nato.

Saludó al tecnico, viejo compañero de ruta en la primera del Ward, y se abrazó fraternalmente con ex compañeros de equipo, Corretxa, Tolosa, Winogran... todos ahi para recibir al mesias.

Dejó su bolso a un costado y se puso a trotar.
Habia vuelto a entrenar al Ward el señor Gaston Hernan De Luca.

Fue un entrenamiento activo. Mucha gente. Mucho ejercicio. Y un partido final de 7 vs 7 donde Gaston dejó en claro que dos años sin tocar un balon no son nada. Con el mismo estado fisico que la ultima vez que se lo vió en las canchas, en aquella recordada final del Super 4 2006 donde el grisirojo se consagró campeon, llevó adelante a su equipo con sapiencia y madurez. La zurda sigue tocada por la varita, como siempre, y el timido jopo sigue ahi tambien, como una marca registrada en su andar acartonado.
Penetró poco, definió al primer palo como siempre, y no se animó a pie firmes endiablados. De vez en cuando se acomodó el pelo con la zurda, como suele hacer. Y se peleó con Wino. Y compartió anecdotas con Zinola, otro de la vieja camada.

Un par de juveniles sentados en un costado mirando el entrenamiento no creian lo que veian sus ojos. Es rara, esa sensacion... la de ver a alguien que supiste alentar desde una tribuna siendo Menor, quizas Infantil... y de repente verlo de entrecasa, entrenando como cualquier mortal.

Pero la sorpresa y el estupor alcanzó a otros, tambien. El Colo chiquito dijo "me gustan sus piernas, son torneadas". Y Tano Debiase, en una noche fatidica comentó que "no me gusta que venga gente de la nada y opaque a Coqui...".

El Negro se dió unos minutos para hablar, y tambien dejó frases que dejan marcas. "El Coco esta para la celeste y blanca. Tengo un compañero en el Banco Rio que me dijo que Gallardo lo esta mirando.. te juro." lanzó. "Si me ponen al armado con Zinola a la punta ganamos el torneo de pe a pa..." deslizó tambien... Los mas jovenes lo miraban sin poder creer lo que les estaba pasando.

El entranamiento gris se tiño de rojo y de negro. Algunos miramos alrededor... estabamos donde queriamos estar. y estaba El Negro. mas no se podia pedir. Una noche bien Wardense.