Premios Eduardo Sirri 2010 - El Evento

Eran alrededor de las 11am. Manolo CorrT tocaba la bocina en la casa de G-Bones Tolosa.
El sol estaba ya arriba, ansioso. El resto dormia.
En el auto iban ellos dos; y en el asiento trasero, un rollo de diplomas con forma de historia, algunos premios, muchos patys, algunas latitas de bebida y muchas ganas.


Nos vamos ahora un par de horas para adelante.
El team en pleno, felicidad extrema, algarabia, eo eo, pepe papa, pileta, sol, bronceados caribeños por venir.
En reunion extraordinaria la semana anterior, el comite habia cambiado la sede, un poco de arrebato, pero el equipo respondió, como se esperaba. Acudieron al llamado, como pajaros a su nido.

La Chata-Quinta tenia, ahora, el agrado y el honor de ser la sede oficial de la 2da edicion de este evento ya magnifico, los Eduardo Sirri 2010.

Alexis Webcam se prestó entero. Dejó el cuero, la vida, la salud y un par de vasos, y todos disfrutaron.

El team, los interpretes, fueron llegando de a poco, sorteando obstaculos, evadiendo controles, con fintas maquiavelicas, dignas de sabados por la noche. Todos con su malla reglamentaria, y una bolsita de hielo bajo el brazo.

Faltaron algunos ilustres invitados, debemos decir.
No se apresentó el alma-mater del evento, el Señor Eduardo Sirri. Consciente el, quizá, de que el grupo captó el mensaje en 2009, y que la antorcha sigue prendida. Que hay gente para llevarla adelante con el brazo izquierdo en alto, pecho paloma y un latinglobe en la derecha.
Faltaron ganadores del año anterior, Leandro DecimeTanito, Mariano Finitiniwini Winograd, Nicolas Oveja Galli, y se nos hacia un hueco en el corazon. Pero la fiesta debia continuar.


Discurso sentido de inauguración, palmas, gritos, alguna que otra lagrimita... y a los premios.
Una vez mas, como era de esperar, hubo exaltacion e incredulidad en las ternas. Muchos se veian ternados y muchos fuera. Y los gritos de emoción estuvieron a la orden del dia.

Ganaron, nuevamente, algunos premios que estaban cantados. La Perla Negra del año se la llevó el Delfino mayor, por supuesto.
Y claro, como no, como no podia ser de manera diferente, el Eduardo Sirri de Oro 2010 se lo llevó Mariano The Coke a Coula Basile. No ya por sus bajocaderas endiablados, ni su temple ganador. Caracteristicas lindas, si, pero que no importan a los ojos del anonimo jurado de los premios. La premiación se encargó de comunicar que el premio va a su labor social, basicamente. Con asados, soditas, y una union de grupos pocas veces visto. Se recordó, tambien, que tambien fue un gran progreso, de aquel Mariano que no saludaba al llegar, no hablaba mientras entrenaba y no te decia chau cuando se iba.

Parrafo aparte para la estrella de la tarde; que al momento de recibir el premio, se ruborizó con las promotoras, deseosas de una placa con el joven astro.

Y asi se dió por terminado el rito. Con aplausos, caras de alegrias, y felicidad, aunque tambien con algunos labios inferiores montados sobre labios superiores.
A ellos, a los tristones les decimos, Chicos, como dice siempre Mariano El Recaudador, "bueno, mañana vengo tambien..." Piensen. Mañana vuelven, quizas les toca a ustedes.




Todo siguió despues. Pileta, brindis va, brindis viene, brindis vuelve, que me debias un brindis asi que brindame de nuevo.

La cereza estuvo a fin de la tarde, con el ya clasico desafio Mayores vs. Pichones.
Otro match no muy disputado, con los mayores controlando las acciones.
Un Pablo Gonzalez manejando los hilos, desde su baldosa en el centro del estadio, Alexis puro despliegue, Corrblast en la recuperación, Delfino en inevitable goleador, y un Alvarez lleno de estilo y gambeta, fueron los puntos que resaltaron.
Contrastando, lo gris de los juniors. Peleados, desarmados, parecian desangelados. Se les fue el partido, una vez mas, como arena entre los dedos.
Sigamos con las analogias. La victoria es de los mayores, como las olas son del viento.
Y ya.





Pasaron los Tibus 2010.
La organizacion redobló la apuesta. Cambió la sede, dando señales de buena disposicion a quiza algun dia cambiarla nuevamente, quien sabe, para el Guido A. Festa.
Trajo sol, pileta, regalos importados, juegos... y hasta promotoras!
Los comensales se dieron enteros. Y a fin del dia, se podian ver en los cuerpecillos moretones, huevitos, golpes, y un par de manos ensangrentadas.

Fue una tarde de todos. Fiel al año de la ostia que terminaba.
Se abrazaron, medio mareados, medio contentos. Todo llenos.
Se iban, a juntar ganas y hambre de gloria, para reencontrarse en un 2011 que los espera lleno de oportunidades.
Alla vamos, vamos a hacerlo.